domingo, 1 de febrero de 2009

# 32 Panamá - San José de Costa Rica

¿Habra Visa para el cielo?
No todos somos iguales a los Ojos de Migracion

El paso por Panamá y Costa Rica fue bastante breve. Por eso, quisiéramos detenernos solamente en una problemática que ya comenzamos a compartirles en los posteos anteriores pero que, a partir de nuestro ingreso a Centroamérica se hizo mas visible y conflictiva: el fenómeno-problema de las migraciones.
En el relato anterior quedamos en que luego de algunas dificultades habíamos logrado pasar la primer barrera migratoria; finalmente lograbamos salir de Colombia.
Al momento de pasar de Capurganá a Puerto Obaldía (paso que nuevamente hicimos en lancha) nos encontramos con Diego, un guatemalteco que volvía a su tierra. El nos contó que estaba estudiando en Colombia la carrera de "Promotor de salud" y que estaba muy contento pero que ya andaba extrañando volver a su tierra natal.
-Si bien hace un año que estoy en Colombia -nos decía Diego-, ya hace cuatro que me fui de mi casa ya que primero estuve trabajando en los EEUU.
-¿Te fuiste a los EEUU (a partir de ese momento el pobre guatemalteco se quedó invadido de preguntas que como torbellino le comenzamos a hacer).¿Cómo? ¿Dónde? ¿Con quién? etc...
De a poco comenzó a contarnos que apenas había cumplido los 18 años, un coyote lo había hecho ingresar clandestinamente a nortemaerica, que eso le había costado 6000 dolares y que como no los tenía los había pedido prestado, situación que le había costado hipotecar completamente sus primeros seis meses de trabajo. Nos compartió además lo dificil que fue el estar tres años solo, con miedo, siendo maltratado, discriminado, basureado...
-No se pueden imaginar que dificil es partir, que dificil es llegar y cuanto mas dificil es persistir sin que te deporten. No valemos nada, concluyó.
Con Diego hicimos todo el paso de Colombia hasta el ingreso a Nicaragua. Con él además nos comenzamos a adentrar al doloroso mundo de los migrantes, el mundo de miles de hombres y mujeres que, como dice Arjona, empacaron sus ganas de quedarse y su condición de transformarse en el hombre o mujer que soñaron ... y no lograron.


El paso por estos dos países, muy bonitos por cierto pero contrastantes a la vez (Panamá muy neoliberal, Costa Rica en vías de serlo) terminó siendo tan solo una anécdota. El mundo de lo "real" iba por otro andaribel.
Con el tiempo que nos apremiaba porque Año Nuevo se iba acercando, hicimos nuestro ingreso a Centromerica la cual nos comenzó a revelar que por más pequeña que fuera, llevaba en sus entrañas los mismos dolores y grandezas que nuestra querida Sudamérica.


Hasta la próxima.
La EP

No hay comentarios: