lunes, 2 de marzo de 2009

# 41 Tenosique - TABASCO (Mexico)

VOLVER JUNTO A LOS NUESTROS
De camino a Yucatán...

Ni bien se terminó el Festival, con el Herman nos quedamos en el CIDECI un día más para poder charlar un rato con Raimundo Barraza, el director de la Universidad de la Tierra. El nos recibió generosamente al día siguiente y nos explicó la dinámica de este espacio destinado a la promoción de los indígenas. La Unitierra los acoge y les ayuda a profundizar en la riqueza de su cultura dándoles herramientas para mejorar las tecnologías necesarias para producir alimentos y arte indígena. Con Raimundo quedamos en vernos en otra oportunidad para que pudiéramos conocer aun más el predio y los proyectos del CIDECI que incluye además un espacio interdisciplinario de Filosofías y Teologías contextuales.
Ya para el día siguiente, nuestra intención fue seguir de camino al noreste mexicano para lograr encontrarnos en el estado de Tabasco con un fraile conocido que estaba realizando un taller de “Migrantes” con la mayoría de los formandos de la vice provincia de la cual él es parte integrante. Por este motivo decidimos tomar un colectivo desde San Cristóbal hasta Palenque (lugar sagrado para los mayas) y de allí hasta Tenosique, ahora sí, en el estado tabasqueño.
Al llegar, nos encontramos con dos frailes que nos acercaron al predio en donde se realizaban las actividades. En ese lugar estaba esperándonos Fray Gabriel Romero quien nos recibió muy calidamente.
Allí nos quedamos tres días. Si bien el taller ya estaba terminando para cuando llegamos, lo cierto es que no por eso dejamos de adentrarnos al crudo fenómeno de las migraciones masivas. Ya les explicamos en un posteo anterior la política yanqui para frenar migraciones sudamericanas en Panamá. En este caso pudimos comprobar como México hace de tapón para todas las migraciones centroamericanas. Es durísimo ver como los migrantes deben entrar a México por las montañas, sorteando mil y una dificultades y siendo ultrajados y maltratados (cuando no asesinados) por todas las bandas de ladrones que se han formando para saquear a quienes deciden emprender semejante travesía.
Los frailes del sudeste mexicano son parte-integrante junto a otras organizaciones de derechos humanos, de toda una red de contención para que los migrantes sean respetados y logren llegar a destino. Es un compromiso ellos han tomado desde hace unos años el poder profundizar en esta pastoral. Por ello es que se realizó el taller con todos los jóvenes que están en proceso de formación para la vida religiosa. Si bien a este punto le dedicaremos un posteo especial, vale adelantarles que la historia de esta provincia franciscana del sudeste mexicano tiene una riqueza muy particular que la hace diferente y original del resto de las provincias mexicanas. Es una provincia mayoritariamente joven y que busca profundizar en la inculturación del evangelio y en la lucha por la justicia.
Decirlo es fácil, y suena hermoso. La realidad es otra cosa. Nosotros pudimos ver en estos días y en el más de un mes que compartimos junto a ellos, las dificultades que tienen para poder encarnar esas opciones.
No obstante, lo que cuenta aquí es que ya están en camino.
Y para nosotros fue un regalo de Dios poder estar junto a algunos de ellos.
Tal como dice el título del posteo, luego de un largo peregrinar y casi al final...cuando mas lejos estábamos, Dios nos regalo el sentirnos nuevamente junto a los nuestros.
Paz y bien entonces...
La EP

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